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En México viven en pobreza moderada 53.4 millones de habitantes, 43.6% de la población y 9.4 millones, 7.6% de la población en pobreza extrema, de acuerdo con datos de la OCDE |
La
economía mexicana se está expandiendo a un ritmo moderado, respaldada por un
sólido marco macroeconómico y unas exportaciones sólidas vinculadas a la
profunda integración del país en las cadenas de valor mundiales. De acuerdo
con un nuevo informe de la OCDE, ahora se necesita una nueva estrategia para
impulsar el crecimiento, reducir los altos niveles de pobreza y desigualdad y
mejorar el bienestar de todos los mexicanos.
El último Estudio económico de la OCDE de México
analiza los vínculos entre los bajos niveles de vida y la productividad
estancada, los resultados educativos deficientes, el débil estado de derecho,
los obstáculos a la competencia y la informalidad generalizada. La Encuesta
proyecta un crecimiento de alrededor del 1.6% este año y del 2.0% en 2020, en
el contexto de una desaceleración de la economía mundial y las persistentes
tensiones comerciales que podrían poner en peligro las exportaciones, la
inversión del sector privado y las cadenas de valor mundiales.
La encuesta, presentada en la Ciudad de México por
el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, y el ministro de Finanzas de
México, Carlos Urzúa, discute la necesidad de abordar la creciente brecha
entre la economía más moderna y productiva en el norte y centro del país y la
economía más tradicional en el sur, que es fuente tanto de desigualdades como
de pobreza. También analiza cómo la implementación de las reformas recientes,
las mejoras institucionales y los cambios en el sistema de impuestos y
transferencias pueden apoyar mejor un crecimiento más inclusivo y sostenible.
«La economía mexicana ha tenido un buen desempeño
en los últimos años, pero ahora se enfrenta a serios vientos en contra del
entorno externo y a importantes desafíos estructurales en el hogar», dijo
Gurría. «La única respuesta es continuar diseñando e implementando nuevas
reformas para infundir confianza, mejorar la calidad de la administración
pública, aumentar las oportunidades, reducir las desigualdades y lograr una
sociedad más fuerte e inclusiva para todos los mexicanos», indicó.
La mejora de la calidad institucional tendría los
mayores beneficios de crecimiento entre todas las reformas estructurales y
aumentaría el impacto de todas las demás reformas de políticas, según la
Encuesta. Se debe completar la implementación de los sistemas nacionales y
locales de lucha contra la corrupción creados recientemente, junto con la
consideración de la introducción de una agencia especializada e independiente
de lucha contra la corrupción, teniendo en cuenta la estructura federal del
gobierno. Se requieren esfuerzos para garantizar la fortaleza e independencia
continuas de las nuevas autoridades de competencia y los reguladores
sectoriales.
Se necesita una nueva reforma fiscal para mejorar
la recaudación, limitar la evasión y garantizar el financiamiento de la
inversión en infraestructura y políticas para reducir la pobreza y la
desigualdad. La encuesta sugiere que una reforma integral de impuestos y
beneficios a mediano plazo debería tratar de ampliar la base impositiva del
valor agregado, reduciendo las exenciones y eliminando las tasas reducidas al
tiempo que compensa a los hogares de bajos ingresos con subsidios
específicos. También sugiere agregar una mayor progresividad al sistema de
impuesto a la renta personal, a través de un umbral de ingreso más bajo para
la tasa máxima y reducir aún más las asignaciones de impuestos y hacer un
mejor uso de los impuestos sobre bienes inmuebles. Se necesitan esfuerzos
continuos para reducir la duplicación de programas sociales y las superposiciones
de beneficiarios al tiempo que se amplía la cobertura a los pobres que aún no
reciben beneficios, dijo la Encuesta.
Las reformas también son necesarias para reducir
la alta informalidad persistentemente de México, lo que limita el crecimiento
de la productividad y la capacidad fiscal del gobierno para proporcionar
beneficios públicos y redistribuir. Un enfoque coordinado para reducir la
informalidad debería aliviar las cargas administrativas de hacer negocios. La
reducción de los costos de cumplimiento tributario, la reducción del costo de
la creación de nuevos empleos y la reducción de las contribuciones a la
seguridad social para las personas con bajos ingresos se identifican como
deseables y posibles.
Mejores resultados educativos ayudarán a combatir
las desigualdades persistentes e impulsar el crecimiento de la productividad.
Dice la Encuesta Integración ambiental y metropolitana. Los gastos en
educación deben centrarse en la educación preescolar, preescolar, primaria y
secundaria, y debe hacerse más para aumentar la capacidad de las escuelas en
los barrios pobres y para apoyar a los estudiantes de entornos desfavorecidos.
Las preocupaciones de gobernabilidad en la formulación de políticas tienen un
amplio margen para mejorar los resultados económicos y ambientales. Las
reformas en la gobernanza de las grandes áreas metropolitanas permitirían a
los gobiernos locales planificar el uso de la tierra, el transporte público y
la vivienda de manera integrada, aumentando la productividad y reduciendo la
congestión y la contaminación del aire, que afecta más a los hogares de bajos
ingresos.
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