Quien ha desarticulado el Cártel de Tláhuac en 3 ocasiones va a la GN

Mercado Sobre Ruedas

| Trascendido | El trascendido surgió este sábado con Omar García Harfuch, titular de la SSC, quien en Tláhuac ha sido incapaz de desarticular ninguna célula delictiva.

Operativos que no han servido de nada en Tláhuac Tómelo como un trascendido, pero este sábado circuló la versión de que el titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (ssc), Omar García Harfuch, podría ser el próximo director de la Guardia Nacional. Al final del día no sucedió nada. Habrá que ver si sólo fue un petardo de esos que suelen soltar los políticos para llamar la atención. Recientemente afirmó que durante su gestión al frente de la dependencia ha desarticulado 243 células delictivas en la Ciudad de México. Quien ha anunciado la «desarticulación» del Cártel de Tláhuac hasta en tres ocasiones, ha presumido que por la supuesta «nueva estrategia de seguridad» en la Ciudad de México han «disminuido los delitos de alto impacto y la percepción de inseguridad». Asegura que en los últimos tres años, la SSC con él a la cabeza ha desarticulado a 243 células delictivas y detenido a 2 mil 158 personas, sin embargo, en Tláhuac no ha desarticulado ninguna organización criminal en lo que va de su gestión. Lo único que ha desarticulado es el tránsito libre de sobresaltos por parte de conductores de vehículos debido a que las bandas de policías asolan las vialidades de Tláhuac dedicadas a la extorsión de automovilistas y conductores de motocicletas. Según él ya identificó una disminución del 60% en el total de delitos, de más del 70% en el robo de vehículo con violencia y de 51% en homicidio doloso. Por lo visto, para García Harfuch el montaje de su «circo, maroma y teatro» en Tláhuac con aparatosos operativos en tierra hasta con un vehículo de los conocidos como «rinocerontes» y un helicóptero que sobrevuela el área, son suficiente prueba para demostrar sus «desarticulaciones». El caso es que en Tláhuac la policía a su cargo es una de las más corruptas de la Ciudad de México. Seguramente el maquillaje de cifras y el discurso a la escuela cuatrotera de los «otros datos», son su mejor recomendación para seguir en el trapecio de la grilla poltiqueril de cargos públicos.