Titular de la SSC tiene «otros datos» en materia de sembradíos de mota

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Información | Jesús Orta, jefe de la Policía capitalina, se apresuró a desmentir la versión de que en la capital del país, específicamente en Tláhuac, ya había sembradíos de mariguana, ignorando que apenas el pasado 19 de julio habían sido detenidos cuatro individuos en Milpa Alta por tener uno.

El «Perrillas» tendrá mañana viernes su audiencia inicial Mañana viernes se llevará a cabo la audiencia inicial contra Carlos Ramón Hernández Martínez, alias el «Perrillas», líder de sicarios del Cártel de Tláhuac, quien acostumbraba tomarse fotos en un sembradío de mariguana dentro de un predio de dicha alcaldía, una de las últimas en que hizo acto de presencia la Guardia Nacional. Luego de que fueron divulgadas las fotografías del «Perrillas» en un sembradío de mariguana en Tláhuac, el secretario de Seguridad Ciudadana, Jesús Orta, se apresuró a desmentir la versión de que en la capital del país ya había ese tipo de sembradíos, ignorando que apenas el pasado 19 de julio habían sido detenidos en Milpa Alta cuatro personas por tener un plantío de dicha yerba en Calle Prolongación Guadalupe Victoria del Barrio Tula en el pueblo de San Pedro Atocpan. Sin embargo, ante la contundencia de los hechos en el sentido de que el crimen organizado opera a sus anchas en la capital del país, Orta Martínez aseguró ayer que el tiene «otros datos» que le indican que en la Ciudad de México no hay registros de plantíos de mariguana por parte de bandas criminales. Y siguiendo el estilo del obtuso Miguel Mancera cuando fue jefe de gobierno y negaba la presencia de cárteles en la capital al decir que sólo se trataba de bandas de narcomenudistas, el jefe de la Policía dijo que según sus datos lo que hay son «plantíos caseros». De vuelta con el «Perrillas», éste fue capturado la madrugada del sábado pasado después de una orden de cateo, en la alcaldía Tláhuac, luego de varios días de operativos de logística e inteligencia llevados a cabo por agentes de la PDI. Para la Procuraduría General de Justicia capitalina, el «Perrillas» era responsable de la coordinación y logística de eventos violentos en la Ciudad de México entre los que destacan ejecuciones de integrantes de otros grupos delictivos antagónicos, además de encargarse de la recolección de dinero en efectivo producto de la venta de drogas. Estaba al servicio de el «Cindy» –ya también capturado–, uno de los mandos en la estructura del Cártel de Tláhuac, para lo cual se hacía acompañar por un grupo de entre seis y 10 sicarios. Su labor habría consistido en recuperar las plazas y desarticular a los mandos medios de las agrupaciones rivales. A través del mandamiento otorgado por el Juez Centésimo Décimo Quinto en Materia Penal del Sistema Procesal Acusatorio de la Ciudad de México, personal de la PDI ingresó al domicilio ubicado en la Colonia Miguel Hidalgo, donde fue detenido el «Perrillas» y asegurado estupefaciente, el cual era resguardado en recipientes de plástico.