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Ante el acoso de delincuentes que incluso ha costado vidas, dueños de gasolineras en
Tláhuac prefieren pagar porque la policía les brinde mayor vigilancia |
Se sabía que la Secretaría de Seguridad Pública
de la Ciudad de México cuenta con el programa denominado «Acompañamiento a
Cuentahabiente», con el que la policía brinda apoyo y protección a la
ciudadanía en sus operaciones bancarias de forma gratuita y confidencial.
El problema es que en Tláhuac el mentado
programita nomás no funciona, sobre todo desde que el 20 de julio de 2016
un comando de individuos armados y encapuchados le robaron 800 mil
pesos a un comerciante en Tláhuac que se había creído eso de que podía
llamar a la línea telefónica de Asistencia Ciudadana de la SSP para
sentirse seguro con su dinero en la mano.
El caso fue que mientras se trasladaba a una
sucursal bancaria a realizar el depósito, en el Barrio de San Mateo policía
y comerciante fueron interceptados por cuatro individuos encapuchados que
se transportaban en una camioneta blanca, modelo Town & Country, los
que bajaron y encañonaron al uniformado que conducía la patrulla mientras al
incauto ciudadano le arrebataban la bolsa en la que trasladaba su dinero.
Los asaltantes huyeron a bordo de la camioneta
en que viajaban, con placas MDB-1444, la cual fue localizada minutos
después en las calles de Nicolás Bravo y Cerrada de Nicolás Bravo, del mismo
Barrio San Mateo.
Por ello, el Ministerio Público de la
Coordinación Tláhuac 1 abrió la carpeta de investigación por el robo de los
800 mil pesos al comerciante y de dos armas al policía preventivo: una
pistola Glock calibre 9 milímetros, y un rifle MP5, ambas con cargadores.
Hasta la fecha, dos años y casi cuatro meses después,
nadie volvió a saber nada de los asaltantes ni del dinero. Mucho menos de
cómo fue posible que los asaltantes hubiesen interceptado la llamada
telefónica al –en este caso– sector Mixquic, del ingenuo comerciante.
Otro servicio que ofrece la Policía en Tláhuac
Lo que no se había comentado y que recientemente acaba de
trascender, es que presuntamente la Policía Preventiva en Tláhuac brinda el
servicio de seguridad a negocios y establecimientos comerciales, así como a
particulares y unidades habitacionales.
Esa es la razón por la que vecinos de pronto ven estacionadas algunas patrullas de la policía cerca de algún establecimiento comercial o casa particular, cuyos dueños ya han sido asaltados y para zafarse de los delincuentes optaron por pagar una cuota a fin de contar con seguridad.
A decir de fuentes fidedignas de la corporación,
algunos de los negocios «renteados» por los mandos policíacos en Tláhuac
son las gasolineras que se encuentran en San Francisco Tlaltenco y la del Barrio
de los Reyes, en la cabecera delegacional.
Según los trascendidos, la cuota quincenal que
deben pagar los dueños de estas gasolineras es de 15 mil pesos.
Sin importar que los índices delincuenciales hayan
repuntado en Tláhuac en el pasado mes de octubre, la policía está más
ocupada en cuidar a quien tiene posibilidades de pagarle porque le proteja
de los malandros.
En la lista de empresas a las que la policía
debe concentrar su atención olvidándose de la indefensa ciudadanía de a pie,
la cual diariamente debe ingeniárselas para no ser víctima de la
delincuencia, aparecen también dos empresas gaseras, una que se localiza
frente al Hospital Materno Infantil y otra más ubicada en el Barrio de los Reyes.
Por otra parte, un particular paga su
correspondiente cuota para que la policía custodie su casa localizada en la
confluencia de las calles de Cancionero y Farolito de la Colonia San José.
La vigilancia a petición de parte (Previo Pago
por Adelantado obviamente) incluye una unidad habitacional en la Colonia Tres
de Mayo, donde al parecer vive familia del celebérrimo ex «Jefe Apolo», así
como un negocio de aluminio cercano al Zorro Abarrotero, en San Francisco
Tlaltenco.
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