| La morenista Judith Vanegas va por una curul |
El inicio de campañas en Milpa
Alta la tarde del domingo no pudo ser mejor descrita por Sandra González,
quien compartió su nota de color a través del Facebook San Pedro Atocpan
Oficial, Milpa Alta, luego de que fueron los candidatos morenistas quienes se
dieron a sí mismos el banderazo de arrancada.
Con el flamígero título de «llegó
el momento de saber quién es quién», escribe en su crónica que, por un lado, los
milpaltenses tienen como opción la «nada congruente alianza moral» entre
Octavio el «Lechón» Rivero, Judith la «Malquerida» Vanegas Tapia y José
Carlos el «Capullito» Acosta.
«Más que un evento de inicio de
campaña, más que evento político, lo de Morena en Milpa Alta fue una simple
reunión que se llevó a cabo en un salón de condiciones deplorables, con un
techo de lámina que terminó por convertir esa arenga en un sauna humano»,
apunta Sandra.
Como «para documentar el ánimo»,
tal cual solía decir el gran Carlos Monsiváis en sus crónicas del suplemento
México en la Cultura de la revista Siempre!,
la autora del relato presenta el patético panorama que prevaleció en el
arranque de campaña de los morenistas que por dos años no se pudieron ver ni
en pintura y que ahora deben, parafraseando al filósofo popular de
Huehuetoca, «tragar camote sin hacer gestos».
«Con aproximadamente 500
personas –escribe doña Sandra–, entre obligados, acarreados y comprados; un
discurso aburrido, alargado y tedioso por parte del ‘Lechón’ Rivero, lo que
ocasionó que se fuera saliendo del lugar la poca gente que había acudido; una
perorata interrumpida por los abucheos al momento en que intervino Judith la
‘Libertad la Marque’ (sic) Vanegas,
y con pseudo líderes que ni mencionaré porque sería darles importancia, se
desarrolló el vodevil de los candidatos del partido guinda en Milpa Alta». | En Milpa Alta o es Jorge Alvarado o es su esposa quienes van por el PRI |
Previo a aquel «baño sauna» de riesgosa
situación, asienta la testigo de los hechos, Efrén la «Chistosa» Enríquez,
coordinador de campaña de Octavio Rivero, recibió, pero en la casa de su ex
esposa, tres camiones repletos de propaganda de su jefe, para posteriormente
y de madrugada –como mandan los «machuchones»–, mandar pegar «algo de
propaganda del ‘Lechón’». Propaganda que evidencia el tamaño del ego y de los
resquemores del candidato chapulín, porque en las fotografías sólo aparece
con Claudia Sheinbaum; y de la señora Vanegas nada, además de que ésta tiene
muy poca propaganda por las vialidades milpaltenses.
«Obviamente –apunta Sandra González– Octavio jugó sus cartas con (Omar
García) Harfuch-Claudia (Sheinbaum) y esta última no traga a Clarita
Embrujada. Y Judith jugó sus cartas apoyando a Clarita y no a Harfuch y eso
le costó su reelección ante el juego perverso de Octavio Rivero, quien
promovió a discreción la queja e impugnación de la candidatura de Judith –que por cierto debió haber
procedido, ya que a destiempo pidió permiso para dejar su encargo como alcaldesa–», requisito electoral-legal
violado, pero así se las gastan en la llamada 4T.
Mientras que en el otro extremo
sobre el boulevard Nuevo León, a un costado del Monumento a Zapata, los
candidatos de la coalición opositora Va por México, Jorge Alvarado Galicia, Mariana
Moguel Robles y Janny Robles Ortiz, sí tuvieron quién les diera el banderazo
de arrancada a sus campaña y fue Santiago Taboada, candidato del PAN, PRI,
PRD a la jefatura de gobierno.
El acto fue en un espacio
abierto al aire libre, sin sillas que aparentaran gran afluencia y ante prácticamente
igual número de asistentes que los reunidos en el sauna del salón de fiestas.
Aunque según la crónica de doña Sandra hubo 5,000 personas, «sin gente pagada
ni acarreada», pura «gente de convicciones», lo que dejó ver la mano de Jorge
Alvarado como especialista para armar ese tipo de tinglados, con «comparsas,
folclore y alegría» y papelitos de colores a granel.
El regreso de Mariana Moguel a
Tláhuac
Con más pena que gloria se dio
el regreso de la hija de Rosario Robles, Mariana Moguel, a Tláhuac, como
candidata a una diputación local por el distrito 7, por lo que en el afán de
posicionarse busca vender la supuesta confrontación que en sus años de
asambleísta de la Ciudad de México, según ella, tuvo con el entonces jefe delegacional
Rigoberto Salgado en los convulsos días de 2017. | El arranque de una campaña con el sello Moguel Robles. Como ya no hubo de dónde... |
La señora, quien lleva como candidata
suplente a Susana del Razo –que va por su enésima candidatura en Tláhuac, todas con derrotas–, apenas si lograron reunirle a
un centenar de simpatizantes en el inicio de su campaña, la cual tuvo lugar
en la explanada del edificio de la alcaldía en los primeros minutos del
domingo 31 de marzo, lo que dejó ver que, al menos de Tláhuac, la cosecha de
votos será de lágrima.
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