Murió el semáforo de Cuitláhuac y Av Reforma Agraria en Tláhuac

Escenarios | Nadie supo lo que tenía hasta que el semáforo dejó de funcionar hace tres días, desde entonces es un aluvión de mentadas de madre con un gimnasio en la esquina cerrado y que podría ser abierto para que ahí se trompeen irascibles conductores.

Previo al Día de Muertos el semáforo de Avenida Reforma Agraria y Cuitláhuac dejó de funcionar, reportó Noticiudadana en su obituario del día de hoy acerca del acontecer en Tláhuac. Vecinos de las colonias San José y Colonia Santa Cecilia pidieron a través de esa red social que alguien del servicio público, de esta vida o del Mictlán, vean la posibilidad de regresar al infortunado semáforo a la actividad. Y es que en esa confluencia de avenidas es muy común ver que afloren las miserias humanas de conductores de vehículos prestos para no respetar al semejante aventándole el armatoste con tal de pasar primero, además de los intrépidos choferes de féretros rodantes mejor conocidos como mototaxis que también imposibilitan el cruce de peatones. Aquello es un aluvión de mentadas de madre de ida y revire que rebotan en las paredes del gimnasio del deportivo de San José que, de paso, dicen los quejosos vivientes de la zona que ni se encuentra en servicio a pesar de que relativamente es nuevo, por lo que en caso de que nadie atienda la petición de que alguna divinidad de la alcaldía pida a la oficina del hombre-murciélago de la Ciudad de México (vulgo Omar García Harfuch) que lo mande reparar, abran las puertas del recinto para que ahí se trompeen los rijosos y no den deplorable espectáculo en plena vía pública. Nadie supo lo que en la esquina había hasta que dejó de funcionar y ya no marcó el paso de vehículos con sus luces, dijeron algunos dolientes, porque además de los insultos y señas obscenas que se prodigan unos a otros por pasar el embudo vial primero que el otro, dijeron que quienes corren mayor riesgo son los peatones que pueden ser arrollados por algún infeliz cafre del volante. Dicen los dolientes que desde antier se comunicaron a Locatel, pero ahí nadie les respondió, será que como en todo el cementerio de la cuatroté, también están como zombis a la espera de atender los designios del supremo orate de la denostación y despiporre que en atender las   responsabilidades que les competen. Réquiem, pues, por el semáforo de Reforma Agraria y Cuitlahuac y que en mejor deshuesadero esté.