Delitos ambientales en el ejido de Tlaltenco esta tarde ante policías

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| Información | La señora Ana Báez señaló que fue el anterior comisario ejidal, Juan Manuel Romero, quien «repartió» una parte de su parcela a otro ejidatario, en este caso a una señora de nombre Cristina.

A pesar de sorprender en flagrancia el delito ambiental policías no procedieron Actualización 17:46h La señora Báez va hacia el búnker de la Fiscalía capitalina debido a que el señor Venegas llegó con más camiones cargados de material de construcción, y luego que los policías que se encontraban en el lugar dejaron ir al chofer de la unidad. La banda de invasores que opera en el ejido de Tlaltenco en la Alcaldía Tláhuac volvió a arremeter contra la parcela de la señora Ana Báez, donde llegaron a descargar material de construcción para edificar presuntamente una casa, lo cual hicieron ante la presencia de la legítima dueña de la parcela y, también, de policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (ssc). El material para construcción yace sobre el suelo Elementos del sector Mixquic llegaron al lugar, pero como es ya su personal «protocolo», argumentaron que no podían proceder en contra de quien al parecer cometía un delito ambiental, por lo que una vez más se negaron a remitir ante el Ministerio Público al presunto infractor de la ley que presuntamente es para protección del suelo de conservación. Uno de los «halcones» que vigila el ejido «Salió otro dueño de una parte de mi parcela –dijo vía telefónica la afectada–, ahora es un tal ‘Juan Venegas’, él dice que la titular de los derechos es su esposa, así que están tirando material de construcción», señaló a las 16:45 horas. Patrulla en la que llegaron dos policías del sector Mixquic Como se recuerda, el viernes pasado la señora Báez llegó a defender su parcela tras de la alerta que le hicieron vecinos suyos, debido a que ahí se encontraba un grupo de personas a cuyo frente se encontraba «un tal Miguel Ángel Rubio». Más policías llegaron después, pero no sirvió de nada «Le dije, yo no sé si compraste esa parte, tú agarra tu lindero y salte de mi parcela porque tienes ya material dentro. Era un señor todo tatuado, pero el anterior comisario Juan Manuel Romero, ya le había repartido una parte de mi parcela a otro ejidatario, a una señora de nombre Cristina, cuyo esposo es el que supuestamente venía a cuidar», comentó la mañana del viernes. ¿Los «amigos» de la policía? Ese día, la señora Báez rellenó de tierra la fosa séptica que los invasores ya habían hecho, «el vecino de al lado salió a apoyarme y los dos con pico y pala volvimos a rellenarla de tierra». Policías de chocolate, porque no han servido de mucho en el ejido «También quité todas las estacas, estaban muy enterradas, pero me fui recargando sobre ellas y quité todo y se los aventé para afuera», dijo. Una de las cuatrimotos en la que llegó otro policía «Cuando estaba yo aventando el tabicón llegaron (los invasores) y me dijeron: ‘nosotros compramos todo esto y de hecho sacamos a otros que ya habían construido’. Sí, estaban construyendo una casa a un lado, en otra parte de la parcela que a mí no me pertenece. Me dijeron, ‘mira es que a mí me vendieron’, y me mostraron un contrato, una vil fotocopia, muy chafa el documento, a nombre de un tal Miguel Ángel Rubio». Policía omisa que ayuda más a otros que a quienes son víctimas de despojos Esta tarde la señora regresó y encontró que ya había más material de construcción en el suelo, pero los policías que se presentaron en el lugar se negaron a remitir al presunto infractor de la ley ambiental. En todo ese tiempo, «halcones» motorizados estuvieron dando vueltas a prudente distancia para ver lo que sucedía en la parcela de la señora Báez. «Hace dos horas unos individuos en motocicletas están dando vueltas para ver si todavía estoy aquí, son de la banda de invasores, uno dice que es el dueño y prefiero retirarme para no exponerme a una agresión», señaló.