Mercado Sobre Ruedas |
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La Planta Potabilizadora que
la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum,
inauguró con bombos y platillos y gran despliegue publicitario en medios de
difusión el tres de octubre de 2020 en la Alcaldía Tláhuac, donde fueron invertidos 79.5 millones de pesos, para el suministro del vital líquido a 35 mil
habitantes de Tetelco, Mixquic, San
Juan Ixtayopan, Tlaltenco, Zapotitlán y Zapotitla, comunidades que «históricamente habían sufrido de
desabasto de agua», según alardeó en su discurso, y de la que también dijo que significaba el emblema
de una «ciudad innovadora y de derechos»
porque iba a tener un tiempo de operación de 30 años, apenas estuvo en operación poco más de un mes y
se descompuso. Nunca más volvió a funcionar.
La Planta Potabilizadora en el Pozo
Tecómitl 21 dejó de bombear los 60 litros de agua por segundo que, según había dicho la jefa de gobierno en su discurso inaugural, iba a mejorar la calidad del agua
que llegaba a 35 mil habitantes de las comunidades anteriormente señaladas,
con un costo de operación de sólo cuatro
pesos por metro cúbico. A los pocos días de haberla inaugurado –mal presagio
por lo que parece venir con una jefa de gobierno que está más preocupada por su
campaña para ganar la candidatura cuatrotera
de la contienda presidencial de 2024–, la Planta con «tecnología muy especial» que a
través de pequeñas celdas iba a limpiar el agua con electricidad, dio una
desagradable sorpresa a vecinos de Tetelco y Mixquic, los más cercanos a la
dizque potabilizadora, porque una vez que dejó de funcionar, al abrir la llave de agua en lugar de ver que salía el vital líquido, lo que tuvieron que aguantar fue el olor nauseabundo de las
aguas putrefactas del drenaje que quién sabe cómo se colaron por la red hasta
llegar a sus hogares. Algunos vecinos dicen que a los 90 días se descompuso la planta, pero lo cierto es que ésta no comenzó a funcionar
inmediatamente después de inaugurada, sino hasta varias semanas
después, como consta en la información que subió Milenio Diario en su cuenta de YouTube aquel día. Lo que significaría que el
tiempo efectivo que tuvo de funcionamiento dicha planta fue menor, si acaso poco más de un mes, como
aseguran algunos vecinos de Tetelco. 79.5 mdp tirados a la basura. Así se las gasta la 4T La dizque «norma de potabilización» bajo un «nuevo modelo de licitación» que tanto cacareó ese tres de octubre de 2020 la jefa de gobierno, no soportó la improvisación, negligencia, incompetencia y, sobre todo, corrupción, de quienes estuvieron involucrados en la obra. Situación que hoy tiene a los vecinos de Tetelco y Mixquic como al principio, como siempre han estado, con desabasto de agua y porquería en la red; problema que se ha acentuado con el paso del tiempo y de manera significativa con la llegada de los emisarios del nuevo partido preponderante, algunos involucrados en tragedias –por más que el purificador de Palacio los haya querido eximir de toda culpa al investirlos de corcholatas– como la sucedida en la Línea 12 del Metro (con sus 26 víctimas mortales), o un poco antes, con el derrumbe del Colegio Rébsamen en Tlalpan (19 niños y siete adultos muertos). Y conste que por lo visto, para la 4T el tiempo es lo de menos ante las necesidades apremiantes del
pueblo bueno y sabio. Fue el 18 de diciembre de 2019 cuando Sheinbaum
visitó Tetelco y ese día, al estilo de las Mañaneras
del presidente López, operadores suyos
indujeron a pobladores que plantearan el problema del desabasto de agua a la
jefa de gobierno en la plaza pública para que ésta pudiera lucirse, y en efecto, se lució con la
respuesta. Ante la petición de tener agua limpia en la red la jefa de
gobierno, desde el kiosco del pueblo (ver la fotografía inicial), les prometió que un mes después ya tendrían agua potable de calidad. Ahí
habló del pozo que estaba siendo perforado a más de 400 metros de profundidad
para dotar de agua a 35 mil habitantes de agua. «Yo sé que quieren agua limpia y se está
trabajando en este pozo para que pueda ser agua limpia, para certificar que
en efecto el agua debe ser de mejor calidad, yo voy a estar aquí a finales de
enero, principios de febrero y ustedes me van a decir si sí o si no y si no
pues aquí se va tener que quedar el director del Sistema de Agua acampando
hasta que no se dé agua limpia»,
dijo Sheinbaum aquel martes.
Pero la jefa de gobierno no regresó a Tetelco sino hasta 10 meses
después, y sólo fue para engañar –una vez más con otra fraudulenta obra
pública– a un gran porcentaje de habitantes de Tláhuac, que a la postre, por
cierto, han resultado ser de cuero duro,
por aquello de resistir a todas las
calamidades que les han significado los malos gobernantes y representantes populares en los congresos local
y federal. Logreros de la grilla politiqueril que controlan las agrupaciones de piperos que surten de agua a grandes núcleos de población con la condición de que se afilien y voten por Morena el
día en que se lleve a cabo alguna elección o dizque revocación. Desde entonces nadie, ni siquiera Claudia Sheinbaum desde el
gobierno capitalino, y mucho menos del gobierno en Tláhuac, se ha interesado
ni preocupado por preguntar si la Planta Potabilizadora de agua en Tetelco sigue
funcionando. Y como que tampoco ha habido mucho interés en preguntarse si a
la jefa de gobierno le interesaría saber si la planta con la que vino a hacer
el ridículo a Tláhuac sirve o no. Porque también pudo haber sucedido aquello de que la casa pierde, y las mafias de piperos vieron que el
negocio de la distribución del vital líquido había sido severamente afectado
por el funcionamiento de la planta, por lo que no faltó quien hubiese invocado a una
malévola deidad para que la descompusiera. Y así las cosas, ni quién quiera ir a pegar a la
puerta de la planta una estampita del detente
del purificador de Palacio… Al
tiempo. |
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