Salir a votar para que Tláhuac diga adiós mañana a narco gobiernos

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| Columna de Zaratustra | §  Electores tienen una opción real de cambio §  Agresivos los operadores del cártel político §  Acosan e intimidan a colaboradores de equipo rival

Para que no haya ninguna posibilidad de volver a vivir eso en Tláhuac El futuro de Tláhuac se define mañana domingo, de ahí la importancia de salir a votar. Cosa de recordar que por muchos años los electores tlahuaquenses debieron optar por entre el menos peor de los candidatos y el que, de plano, estaba para llorar. Sería hasta molesto recordarlos, pero en lo que ya es reconocido por nuestros lectores como el blog que recoge la memoria política de Tláhuac –desde la edición impresa de Nosotros a partir de 1997– están todos y cada uno de ellos. Sin embargo, como anotamos líneas arriba, en esta ocasión ya no sucederá lo mismo. Porque al menos los electores tienen una opción real de cambio para detonar el progreso económico y, por consiguiente, el índice de bienestar social de la población de Tláhuac. En efecto, durante décadas hubo procesos electorales en que los ciudadanos de Tláhuac sólo tuvieron como opciones a candidatos ineptos, corruptos, mafiosos, bravucones y violentos. Eso no quiere decir que ahora no los haya. Está, por ejemplo, quien busca el regreso de un narco gobierno a la alcaldía Tláhuac. Y, por consiguiente, a escenarios de corrupción y violencia que la inmensa mayoría de la gente ya no quiere volver a vivir. De ahí la importancia, entonces, de salir a votar el domingo, aun cuando quienes integran el llamado cártel político de Tláhuac estén sumamente nerviosos a causa de que durante el período de campaña la ciudadanía nada más no les dio su apoyo por su credibilidad hecha añicos. Y esos nervios, ante la posibilidad de la derrota, salen a relucir a través de fake news en las que espetan, a través de las redes sociales –con bots que evidencian la cobardía que caracteriza al operador de la granja al servicio del protagonista de la página más negra en la historia de Tláhuac en una gestión pública–, infundios y denostaciones que buscan desprestigiar a quien por lo vivido en días pasados tiene amplias posibilidades de triunfo. Pero las fake news no es lo único con lo que estos mafiosos de la narco grilla buscan amedrentar al adversario que tiene mayores posibilidades de triunfo. El acoso y la intimidación, prácticas comunes de un grupo delincuencial, son el recurso del que echan mano como arma contra quienes integran el equipo de la candidatura rival. La ponchadura de llantas y el dejar mensajes con todo tipo de denostaciones es en lo que se han ocupado estos rijosos malandros durante el período de veda electoral. Además de que la intimidación a vecinos de Tláhuac para que el domingo vayan a votar por el regreso de un narco gobierno a la demarcación no ha parado. Su desesperación es porque si no consiguen reinstaurar la corrupción para seguir medrando con los cargos públicos para disfrute y goce de los presupuestos, y con ello continuar el nepotismo y el absolutismo como sello de la dizque transformación, con gente del cártel de la localidad incrustada en el organigrama, literal, se les va el último tren del oportunismo depredador. Habrá entonces que salir a votar el domingo. Mientras más temprano se haga, mejor. El hartazgo de un amplio sector de la población por gobiernos de seudo izquierda en Tláhuac que sólo han servido para la formación de nuevos millonarios, parece que derramará, por fin, el vaso. Vivir en una demarcación con los peores servicios públicos –como fue el caso de la Línea 12 que mantiene enlutadas a familias tlahuaquenses, entre muchos otros– y ser tema casi diario de la nota roja, son síntoma de que el estado de cosas puede cambiar mañana domingo gracias al voto de los electores. Como anotamos antes, al menos una opción la hay. Los indecisos, si es que todavía queda alguno por ahí este sábado, podrán ir a su correspondiente casilla a elegir entre tomar esta oportunidad única o, de plano, dejarla ir, para infortunio de una demarcación saqueada hasta la ignominia por huevones que un día se aparecieron en Tláhuac con una mano adelante y otra atrás, y hoy quieren perpetuar su cacicazgo… Al tiempo.