Donaciones de empresas al Hospital General de Tláhuac desaparecen

Mercado Sobre Ruedas

| Información Artículos como agua, refrescos de cola, galletas y material para protección de médicos y enfermeras, desaparece de un día para otro, denunciaron.

De un día para otro todo esto desapareció La pandemia del Covid-19 le cayó como «anillo al dedo» a empleados administrativos del Hospital General de Tláhuac, debido a que son ellos quienes han aprovechado al máximo los numerosos donativos que a diario llegan al nosocomio, consistentes en diversos productos de empresas que buscan estimular y reconocer el trabajo de los héroes en la lucha contra el coronavirus: el personal médico y de enfermería. Más tardan los trabajadores de empresas refresqueras, de agua embotellada y de alimentos en descargar los productos cuyos destinatarios son los médicos y enfermeras, que los empleados administrativos en vaciar la bodega para subirlos a sus automóviles y sacarlos del hospital. Al respecto, ni la jefa de recursos materiales, Carmen Jesica Domínguez Cruz, ni la subdirectora administrativa, Rocío Odilia Barrios, han dicho nada al respecto. Personal de enfermería del nosocomio declarado como hospital-Covid, denunció a Nosotros la mezquina actitud de algunos empleados administrativos quienes, incluso, escamotean a médicos y enfermeras artículos que son de vital importancia para su protección como son cubrebocas, googles y caretas. En lugar de cerveza, agua. Pero la rapiña es la rapiña Diversas empresas se han sumado al reconocimiento que la sociedad mexicana hace del trabajo de médicos y enfermeras por su heroico desempeño en el combate a la pandemia y busca, a través de donativos, compensar su lucha haciéndoles más llevadera sus difíciles jornadas en las que literalmente se baten a brazo partido contra el coronavirus. Sin embargo, el problema en el Hospital General de Tláhuac es que mientras médicos y enfermeras se encuentran dentro del área gris –como llaman al área donde se encuentran los pacientes con Covid–, sin poder probar alimentos ni tomar agua a fin de evitar ir al sanitario y minimizar los riesgos de contagio, algunos empleados administrativos vacían la bodega donde son almacenados los donativos. «El martes estábamos en la fila para salir de nuestro turno y vimos cómo grupos de trabajadores de Cocacola y Sanborns descargaban muchas cajas de botellas de 600 mililitros, paquetes de botellas de agua Bonafont, de Gatorade azul, comida y demás cosas que están regalando las empresas para quienes estamos atendiendo pacientes con Covid. También llegó un camión de la cervecería Modelo que mandó cajas de botellas con agua y le puso una leyenda muy bonita que se refiere a nosotros como los héroes que están en la batalla contra el coronvirus», relató una enfermera. «Pero este miércoles cuando salí de mi turno, tenía la boca reseca y la lengua pegada al paladar porque no tomamos líquidos para no tener que ir al baño mientras estamos con los contagiados de Covid, así que fui a pedir un botella de agua y me dijeron que ya no había, que ya se había acabado todo», refirió. A decir de un enfermero, luego de que terminan su jornada en el área de Covid los jefes de servicio ofrecen agua al personal médico y de enfermería. «A mí me ha tocado que me den unas barritas de Allbran y una botella de agua, pero nada más, hoy pedí una coca y me dijeron que ya no había», comentó. «Varias compañeras –dijo otra enfermera– vimos cómo descargaban paquetes y paquetes de material que ha sido donado al hospital, además de cubrebocas KN95, con cajas de caretas y googles, pero hoy fue una enfermera a pedir unos googles y una coca y le dijeron que ya no había ninguna de las dos cosas», aseguró. De acuerdo con el testimonio de testigos, las donaciones se encontraban almacenadas, «pero de un día para otro se vació la bodega, lo que quiere decir que alguien se está robando las cosas del hospital», indicó. «Seguimos usando googles rotos, usados, caretas estrelladas por el uso, y como los policías que se encargan de la vigilancia en el estacionamiento no le revisan las cajuelas de sus autos a los administrativos cuando salen del hospital, pues todo sacan», asentó. «No es justo porque el personal administrativo ni siquiera se mete al área gris como nosotros, los jefes administrativos como Rocío Odilia y Carmen Jesica se quedan con las secretarias en sus oficinas, mientras debemos aguantar la presión de los supervisores porque como desaparecieron algunos servicios nos dicen ‘ahora te toca estar acá’, ahora allá’, cuando a los médicos cubanos y los de contratación no les hacen lo mismo», relató un integrante del personal de enfermería del Hospital General de Tláhuac.