Concesionarios del transporte también quieren subsidio

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Información | La sugerencia del presidente López que hizo al gobernador de Nuevo León para subsidiar a concesionarios no desagradó a los de la Ciudad de México, por lo que ahora piden que también a ellos se les de o, de lo contrario, amenazan con subir dos pesos la tarifa.

Toman recomendación de López al Bronco en Nuevo León y piden subsidio Si el gobierno de la Ciudad de México no autoriza el incremento de dos pesos al pasaje, concesionarios del transporte público agrupados en la Fuerza Amplia de Transportistas (FAT) anunciaron que van a llevar a cabo otra serie de bloqueos de vialidades en los cuatro puntos cardinales de la capital entre el 10 u 11 de febrero próximo. Sin embargo, dijeron, estarían de acuerdo en una medida similar a la que el presidente Andrés Manuel López sugirió al gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez, como sería la entrega de un subsidio a los concesionarios a fin de no perjudicar a los usuarios. Al respecto, Nicolás Vázquez, vocero de la agrupación, dijo que se ha creado un círculo vicioso donde las autoridades advierten que no habrá incremento si no existe mejora en las condiciones del servicio, pero mejorarlo más ya no pueden, porque esto está a la vista con metrobuses, corredores y rutas con autobuses, y ya no están dispuestos a renovar las unidades sin certeza jurídica para poder invertir a futuro ni una tarifa que castigue el bolsillo sólo del transportista. Los concesionarios del transporte público volvieron a retomar las calles esta mañana, como lo hicieron en mayo y septiembre del año pasado, con las mismas demandas de incremento de dos pesos a la tarifa y la renovación de las concesiones que se vencieron en 2018 al 90 por ciento de ellos, porque, acusan, el gobierno de la Ciudad de México sólo les promete mesas de diálogo para buscar una solución que nunca llega porque los funcionarios las abortan. No existen condiciones para comprar autobuses nuevos porque deberían pagar mensualidades de 30 mil pesos con una tarifa de sólo seis pesos, y toda la carga de los incrementos a los precios de los combustibles y demás insumos que se han generado en los últimos meses y años, sin recibir el incremento que debería ser indexado a la inflación. Nicolás Vázquez aseguró que la secretaria de Gobierno, Rosa Icela Rodríguez, prometió darles certeza jurídica con las concesiones, pero «es hora que ni nos volvió a llamar para arreglar el asunto, ni mucho menos se arregló el resto de la problemática que enfrentamos». Por lo pronto, subrayó que son dos demandas fundamentales que plantean: incremento a la tarifa en al menos dos pesos y tener certeza jurídica de sus concesiones. «En la Ciudad de México ustedes pagan cinco y seis pesos, pero aquí, a unos kilómetros, en los distintos municipios colindantes del estado de México, los pasajeros pagan el doble o más. Ahí la tarifa mínima actual es de 12 pesos, cuando el precio de la gasolina, el diésel y los demás costos de mantenimiento son iguales en toda la zona conurbada». «El gobierno sabe de qué hablamos –manifestó–, porque nosotros estamos subsidiando cada uno de los recorridos que se realizan en la Ciudad de México con seis y siete pesos, al menos. Si esos seis o siete pesos llegaran a nuestro recaudo, bien podrían servir, al menos, para tener mejores vehículos, para dar un servicio más cómodo y eficiente, porque las malas políticas públicas aún no logran destrabar el acceso a una mejor movilidad», comentó. Por su parte, Francisco Carrasco advirtió que la pequeña movilización de hoy fue para darle la mano a las autoridades de la Ciudad y recomenzar un diálogo fructífero, con el que se les dé solución; de lo contrario, el 10 u 11 de febrero, tal y como lo hicieron el pasado tres de septiembre, van a realizar bloqueos en los cuatro puntos cardinales de la capital, «y se incrementarán cada vez más si se mantiene la cerrazón» en el gobierno capitalino. Por último, refirió que le dijeron al gobierno de Claudia Sheinbaum que si no quiere otorgar el incremento directo al pasaje para no sacrificar al usuario, entonces «hay un camino y se llama subsidio. Lo acaba de proponer el presidente López en el caso de Nuevo León. Si el gobierno tiene la intención de meterle dinero del erario público, que lo haga como ya lo hace en Metrobús con aproximadamente dos mil millones de pesos», como fue el caso el año pasado.