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Mercado Sobre Ruedas
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Recursos por dos mil 130
millones de pesos solicitó el rector de la Universidad Autónoma de la Ciudad
de México (UACM), Galdino Morán López, ante legisladores de la Comisión de
Presupuesto y Cuenta Pública del Congreso de la Ciudad de México.
Enumeró algunos de los
proyectos que su administración va a impulsar, como es la creación de la coordinación
de investigación, una unidad de convenios y otra más de género, así como una escuela
inclusiva.
Asimismo, dijo que los
recursos servirán para la construcción de los planteles de Magdalena
Contreras y Milpa Alta; pero también para la conformación del Centro de
Extensión Cultural y la Biblioteca Digital Palacio del Conde de Regla.
De igual forma, parte de
los recursos serán destinados a la ampliación de los planteles Centro Histórico
y el de Casa Libertad; como también de la sede José T. Cuéllar y el
incremento de la oferta en el turno vespertino.
En materia de
investigación, sostuvo que, para el siguiente año se buscará –además de la
creación de la Coordinación de Investigación– el incremento de la oferta
académica en cinco posgrados más; el incremento del número de profesores del
Sistema Nacional de Investigación en cuando menos 10 por ciento; suscribir
convenios con el Consorcio Nacional de
Recursos de Información Científica y Tecnológica (Conricyt); la adhesión a la
Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior
(ANUIES); la inclusión de los posgrados en el padrón del Consejo Nacional de
Ciencia y Tecnología (Conacyt), y el desarrollo de más líneas de
investigación acordes a la Ciudad de México.
Morán López dijo que en
México se cumplen tres décadas de un profundo cambio en la educación superior,
donde un nuevo modelo, el neoliberalismo, sustituyó al anterior proyecto
nacionalista-revolucionario de país, el cual reivindicaba la educación como
su patrimonio social y derecho de las clases mayoritarias y socialmente
marginadas.
«Este nuevo proyecto
implicó restricciones presupuestales y privatización de la educación superior»,
señaló, pero en oposición a esa tendencia se creó la UACM como proyecto
educativo que fijó sus preocupaciones en las necesidades de su población
estudiantil y no en la del mercado, lo cual significó para nuestra joven
comunidad navegar a contracorriente en medio de ataques y prejuicios
encabezados por los sectores económicamente más beneficiados».
Aseguró que la UACM abre
sus puertas a todos los sectores de la población de la Ciudad de México,
debido a que su tarea principal «es la formación de mujeres y hombres con el
fin de generar compromiso social, cultura, libertad, pensamiento crítico y humanista,
y conocimientos científicos y tecnológicos sólidos que contribuyan a
construir una sociedad educada, equitativa y solidaria».
Por ello, para 2018 la
UACM tuvo un nuevo ingreso de 4,779 estudiantes, con lo que llegó a una
matrícula inscrita al semestre 2018-II de 18,355. El número total de
estudiantes con el 100 por cientos de los créditos es de 3,402 –a nivel
licenciatura– y 443 para posgrado.
Es una institución
educativa que consigue sus propósitos en congruencia con sus principios
fundacionales, como atender la demanda de educación superior en la Ciudad de
México para los sectores históricamente excluidos, precisamente en las zonas
más marginadas, indicó.
«Detrás de la
construcción de esta institución hay una herencia de luchas por la defensa de
la educación pública y gratuita», subrayó.
En materia de apoyos
estudiantiles, la institución cuenta con los programas de salud integral del estudiante,
como son los programas de Atención Psicopedagógica, Identidad Universitaria,
actividades lúdico-deportivas; difusión del modelo y oferta educativa de la
UACM; formación para el trabajo; becas a licenciatura y posgrado; apoyo a
proyectos estudiantiles; apoyo para la realización de visitas y prácticas de
campo; foros académicos y culturales nacionales e internacionales; apoyo para
impresión y empastado de tesis; y apoyo a estudiantes en situación de
discapacidad.
«En sus manos se
encuentra la posibilidad de que la UACM contribuya, en los hechos, a saldar
la deuda histórica con los excluidos, y dignificar la aportación real que el
pueblo de esta capital ha hecho a la humanidad durante 700 años, sin que le
haya sido reconocida», asentó.
Por ello, el rector
confió en los «oídos receptivos y voluntades decididas» de los legisladores que
sepan «estar a la altura de las circunstancias y cumplir con el deber que la
historia hoy les reclama».
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