Los riesgos de una avenida como la Tláhuac sin balizar

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| Contextos | El pasado sábado un motociclista al parecer perdió la vida por no ver a tiempo un bordo que cual trampa mortal se encontraba sin balizar, y a tres días del fatal accidente nadie de la alcaldía se ha dignado enviar a algún trabajador para que lo pinte y evitar más tragedias. Una de la mañana con 26 minutos y 51 segundos La madrugada del pasado sábado, una motocicleta pasó frente a las instalaciones de la revista NosotrosMSR a más de cien kilómetros por hora. De acuerdo con las cámaras de videovigilancia de nuestra empresa comunicacional, la unidad fue captada a la una de la mañana con 26 minutos y 51 segundos (1:26;51). Metros adelante, su conductor perdió el control de la motocicleta y fue a impactarse en la explanada de la capilla de Mazatepec, en San Francisco Tlaltenco. Las cámaras de video captaron también que la primera patrulla de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México pasó frente a nuestras oficinas a la una de la mañana con 31 minutos y 54 segundos. Una segunda patrulla pasó a la una de la mañana con 32 minutos y 12 segundos. En tanto que una tercera unidad lo hizo a la una de la mañana con 32 minutos 18 segundos. La primer patrulla que se presentó en el lugar del accidente Desgraciadamente el conductor de la motocicleta falleció de inmediato, en tanto que su acompañante, una mujer, fue trasladada a un centro hospitalario logrando salvar la vida debido a que ella sí llevaba puesto el casco. Por esta ocasión el accidente fue manejado con mucho hermetismo por parte de las autoridades correspondientes, debido a que la persona que perdió la vida era sobrino del alcalde de Tláhuac, Raimundo Martínez Vite. La segunda unidad que arribó al lugar Pero sobre todo, debido a que el joven trabajaba con él en la administración pública, lo cual ya ni debería ser motivo de escándalo dado que de unos años a la fecha las nóminas de la burocracia en los tres niveles de gobierno están atiborradas de la parentela del titular. Y quienes antes solían poner el grito en el cielo porque había nepotismo en las gestiones públicas ahora son gobierno. Pero de vuelta con el fatal accidente sucedido la madrugada del pasado sábado cabe decir que el tope que lo ocasionó, aunado a la mala iluminación del lugar, aún no han sido foco de atención de la administración pública de Tláhuac. La respuesta fue inmediata, pero desafortunadamente una persona falleció ¿Estarán esperando que suceda otro accidente de fatales consecuencias para mandar pintar el bordo que por lo visto el conductor de la motocicleta no alcanzó a ver a tiempo para bajar la velocidad? El problema es que a un mes con 20 días de haber dado inicio la gestión pública de la dizque «cuarta transformación», Martínez Vite no parece dar señales de que no es atole el que le corre por las venas.