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jueves, 14 de diciembre de 2017

Suelo de conservación de Tlaltenco sucumbe ante antorchos y autoridad

Mercado Sobre Ruedas
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Una vasta zona de suelo de conservación de San Francisco Tlaltenco, en la delegación Tláhuac, vive sus últimos momentos de esplendor ante el arribo de grupos promotores de vivienda y fraccionadores, que para tener las cosas más fáciles los aviesos líderes acostumbran poner su capital político a las órdenes de quien encabece la administración delegacional

Un viejo letrero que acabó convertido en monumento a la burla y la corrupción.
Fotografías NosotrosMSR
Aun cuando el programa delegacional de desarrollo urbano de Tláhuac prohíbe la construcción de viviendas en suelo de conservación, la administración delegacional ha ignorado esa prohibición en San Francisco Tlaltenco, donde hasta la propia Comisión Federal de Electricidad se ha prestado a servir a los intereses de agrupaciones promotoras de vivienda que ha sentado sus reales en la colindancia con la Colonia Ampliación López Portillo.
Hasta alumbrado público de día tienen quienes se han asentado en suelo de conservación de
manera irregular
Al salir por Avenida de las Minas y cruzar la Calle Calvario de dicha colonia, el suelo de conservación, antes delimitado por una mojonera que en la actualidad sólo sirve de estorbo para los fraccionadores, simple y sencillamente ha desaparecido, porque ahora el camino al volcán Xaltepec o Cerro de Guadalupe sirve a quienes ahora pueblan esa zona para llegar a sus hogares.
La CFE se ha encargado de seguir introduciendo postes y cableado para suministrar energía
eléctrica a quienes de manera irregular se han asentado en suelo de conservación
Las prohibiciones del programa delegacional de desarrollo urbano y las presuntas sanciones para quien construya vivienda, tale árboles o tire cascajo, son letra muerta para una administración delincuencial como la que actualmente tiene secuestrado Tláhuac.
Servicio de luz a domicilio con todo y alumbrado público por cortesía de la CFE
A decir del ejidatario Víctor Lugo, cuando vio que la Comisión Federal de Electricidad colocaba postes de concreto dentro de los predios de particulares para tender la red de suministro eléctrico –a lo largo de la llamada calzada del Piñón, por la que se llega a las faldas del cerro– fue hará cosa de seis meses a preguntar a la sucursal de San Pedro Tláhuac por qué lo hacían, nadie ahí le pudo dar alguna explicación. La única respuesta que le dieron fue: «Nosotros no colocamos los postes ni lo autorizamos».
Por este camino ya planean desde el gobierno central abrir una gran avenida, total,
el negocio es primero
Fue entonces cuando les reviró: «Si ustedes no lo autorizaron, ¿por qué no van y retiran esos postes con todo y cableado?» Pero las respuestas que le dieron fueron de risa. Le dijeron que desconocían quién estuviera haciendo la introducción de los postes y el cableado, pero que cuando ya hubiera energía eléctrica ellos como CFE no iban a permitir que la gente se conectara, y de ahí no salieron. Sin embargo, luz ya hay en toda esa zona. Hasta para alumbrado público.
Todos los servicios, luz y agua, en el suelo de conservación en extinción de Tlaltenco
Entre el gorjear de gorriones que se escuchan al paso de la unidad en la que nos transportamos, Lugo –quien fue secretario del anterior comisariado ejidal– dice que la zona está invadida por los de Antorcha Popular, quienes llevan a cabo la lotificación de predios sobre todo en Santa Catarina Yecahuizotl, pero también en Tlaltenco.
En esta fase de la construcción es cuando nunca se aparecen los perrunos inspectores de
la delegación morenista de Tláhuac. Vienen, sí, pero cuando ya la obra está terminada
Ahora les están pidiendo a los dueños de estos predios que se encuentran a las márgenes del camino que cedan tres metros de cada lado para ampliarlo, y así que tome forma y se consolide la urbanización, porque lo cierto es que el cableado en los postes sigue prolongándose cada vez más por parte de la CFE, aunque ahí insistan en decir que no saben quién está haciendo la obra.
El gancho es la presunta venta de predios en Santiago Tepolula, en Tenango del Aire. Pero los
predios son aquí, en Tlaltenco
Como se sabe, todas estas tierras de Tlaltenco son la reserva territorial que tiene en la mira el gobierno de la Ciudad de México para expandir la mancha urbana, a fin de hacer más redituable la línea 12 del Metro, por donde ya se puede transportar la fuerza de trabajo que aquí se encuentra y la que sea ubicada, hacia los grandes centros de producción de la zona metropolitana.
El No se vende y que se trata de una propiedad privada, en suelo de conservación indica
precisamente todo lo contrario. Cuestión de pasar a preguntar con el dueño o encargado
Lugo, quien dice tener por el camino al cerro que más adelante se bifurca un predio de 20 mil metros cuadrados, comenta que cada vez que viene a darle una vuelta encuentra que el suelo de los alrededores ya fue nivelado y hasta lotificado, listo para construir.
«Y nuestro coordinador territorial no hace nada, ni siquiera se inconforma, es el colmo. Antes porque eran del PRD, y ahora porque se cambiaron a Morena, el caso es que siempre es lo mismo», lamenta.
Una zona en constante movimiento de unidades que transportan material de construcción
«Lo malo es que cuando llego con los vecinos a exponerles el problema de la urbanización de nuestro suelo de conservación, y les pido que firmen una hoja que les muestro para que manifiesten su desacuerdo, me dicen que no, que no quieren problemas, entonces no hay modo de defender esto», refiere.
¿Qué autoridad tiene que detener esto?, se le pregunta.
«De inicio, la delegación Tláhuac, aunque ellos a mí me han dicho que no les corresponde, que le corresponde hacerlo a la zona federal, pero el caso es que sí les corresponde cuando de ir a clausurar una obra se trata. ¿Por qué no van a decirle a alguien que construye que eso no está permitido? Primero te dejan que construyas y una vez que terminas van y te clausuran».
Lo cierto es que así operan estos morenistas de la honestidad valiente.
Pura construcción de tabique y cemento, lo que habla del poder adquisitivo de sus
moradores
«A los antorchos no los clausuran, pero si un nativo de Tlaltenco como propietario de un predio se pone a hacer un cuarto, luego luego vienen a clausurarle», señala Víctor Lugo.
Hay quienes deben caminar hasta los linderos con la Ampliación López Portillo para
poder transportarse hacia otros lugares de Tláhuac o de la ciudad
El caso es que toda esta zona de suelo de conservación de igual forma ha servido para que los de la administración delincuencial de Tláhuac sigan sacando provecho de la devastación de la zona, porque de mantener el área sin permitir asentamientos humanos no sería redituable para ellos, que son los primeros beneficiados como presunta autoridad.
La mojonera que antiguamente marcaba los límites de lo que era zona urbana del suelo
de conservación. De aquel lado de la calle la Ampliación López Portillo
Por lo pronto, esa zona de Tlaltenco vive sus últimos momentos de esplendor ante el arribo de grupos promotores de vivienda, como los antorchos o los Panchovillas Independientes, donde sus aviesos cabecillas, para tener las cosas más fáciles, negocian su capital político poniéndolo a las órdenes de quien encabece la administración delegacional en Tláhuac, así se trate de un supuesto narcogobierno.

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