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Apenas había sido instalado el tendejón navideño cuando hoy por la mañana fue
consumido por un incendio provocado. Fotografía Milenio Diario |
El tendejón que servía
como mercado improvisado de artículos navideños que desde hace aproximadamente
tres décadas venía siendo instalado sobre la vialidad de Avenida Trujano, a
la altura del Parque Morelos, en la ciudad de Gómez Palacio, Durango, gracias
a las influencias de líderes de locatarios, quedó reducido a cenizas luego de
que hoy fueron consumidos los 42 locales que lo conformaban por voraz incendio
que comenzó alrededor de las cinco
de la mañana… Tras de que sucesivas administraciones municipales ignoraron
los señalamientos de vecinos en el sentido de que dicho mercado –levantado con
madera y láminas de cartón, material inflamable– se significaba por ser de
altísimo riesgo tanto para los propios locatarios como para los vecinos, finalmente
hoy y en situaciones por demás extrañas, fue devorado por el fuego… Según la
declaración del velador del lugar, el fuego fue provocado debido a que pudo
ver el momento en que se acercó al lugar un individuo por la parte de la
Calzada Agustín Castro, para después aventar un cerillo encendido al
tendejón, dando inicio al incendio en forma instantánea, lo que sucede
cuando previamente fue rociado algún tipo de combustible… Sin embargo, aun
cuando el velador contaba con un extinguidor, éste nunca hizo el menor
intento por sofocar el incendio; incluso, ni siquiera reportó el siniestro al
911, como pudieron constatar los vecinos cuando varios minutos después lo
hicieron al número telefónico de emergencia en demanda de auxilio… Incluso,
personal del canal de una televisora se presentó en el lugar mucho antes
de que lo hicieran los bomberos… Fue hasta las siete de la mañana cuando unidades
de protección civil y bomberos pudieron sofocar el incendio, tras del cual
solamente se registraron daños materiales; aunque los locatarios perdieron
toda su mercancía… Lo cierto es que en dicho mercado improvisado de artículos
navideños algunos locatarios vendían cada año gran cantidad de artículos elaborados
con pólvora, los cuales al explotar contribuyeron a que las escenas fueran
por momentos dantescas debido a que las llamas alcanzaron varios metros de
altura… Cabe mencionar que la gran variedad de artículos de pirotecnia –como cohetones,
palomitas, chifladores y buscapiés– comenzaron a explotar varios minutos después
de que el incendio había sido causado por el desconocido, por lo que no se
puede descartar la hipótesis de que antes de que fuera arrojado el cerillo,
algunas partes del tendejón habían sido rociadas con gasolina… Habrá
que esperar los resultados de las investigaciones que lleven a cabo las
autoridades y peritos correspondientes, pero el escenario de terror que hoy
vivieron los vecinos del lugar –incluyendo la familia que tiene la concesión desde
hace más de tres décadas para operar unos juegos mecánicos en la esquina de
Avenida Trujano y Calle Ocampo–, ya lo habían previsto debido a que en las
sucesivas administraciones municipales habían sido demasiado condescendientes
con los líderes de estos locatarios; debido a que incluso, a un costado del
mercado improvisado desde hace dos administraciones se hicieron las gestiones
pertinentes ante la Comisión Federal de Electricidad para que les pusieran una
conexión de dónde conectarse con su propio medidor… Lo irregular, dado lo
estrecho del sitio y el disimulo por conveniencia política de los
responsables de protección civil del Ayuntamiento gomezpalatino, y que
evidencia el grado de corrupción entre munícipes y líderes de locatarios, por
el capricho de ediles convenencieros se hizo regular; legalizaron lo ilegal,
como ha sido costumbre y tradición en administraciones municipales donde
prevalecen las influencias y el compadrazgo… Habrá que ver si después de esta
tragedia, que por fortuna solamente quedó en pérdidas materiales para los
locatarios del tendejón navideño, la edil Leticia Herrera no comete el error de permitir que aquellos vuelvan
a colocarse en el mismo lugar… Porque, repetimos, por años los vecinos le dijeron a los
sucesivos alcaldes que ahí no era lugar para que quedaran bien con sus
compinches correligionarios tricolores de los líderes de los locatarios de la CNOP priista; pero
como siempre sucede en esto de las transas y componendas de los presidentes
municipales con logreros lidercillos a fin de que estos los favorezcan con el
voto de sus agremiados al momento en que brinquen de cargo público, nadie les
hizo caso y hoy todos pudieron ver las consecuencias… Aun cuando del lado de
la Avenida Rayón la lateral del Parque Morelos es mucho más espaciosa, e
incluso se cuenta con más lugar para que los particulares puedan estacionar
sus automóviles, la terquedad de unos cuantos hizo que el tendejón siguiera
siendo instalado en Avenida Trujano… Por lo pronto, bueno será que en la
administración municipal vayan considerando otros espacios para reubicar el
mercadito navideño, como bien pudiera ser en una parte del gran estacionamiento
de La Soriana en Zarco y Avenida Victoria, el que por años ha permanecido
desolado, y donde los locatarios no molestarían a nadie debido a que ahí se
cuenta con un amplio espacio que serviría para estacionamiento de automóviles…
Mientras tanto, habrá que esperar los resultados de la investigación para
poder saber las causas por las que alguien quiso aniquilar el patrimonio de
los locatarios para fastidiar a algún actor en específico, sin prever –como sucedió
con el lamentable caso del incendio de la Guardería ABC de Hermosillo– que
tal infausta acción podía traer mortales consecuencias para terceros… Afortunadamente
nada de esto sucedió, sólo pérdidas superiores a los cinco millones de pesos,
de acuerdo con las declaraciones de los locatarios y el monto que cada uno
invirtió para la presente temporada navideña; pero en tanto se esclarecen los
hechos, de protección civil del municipio debe venir la orden de que esa parte
de la Avenida Trujano no es lugar para mercadear ningún tipo de objetos… Al
tiempo.
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