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sábado, 15 de julio de 2017

Ola delincuencial imparable en Tláhuac. Se ensañan con taxistas

Mercado Sobre Ruedas
En una de las bases de taxis que se localizan en la estación del Metro Tláhuac, ya van cuatro choferes que han sido despojados de sus vehículos | A uno lo fueron a tirar detrás del Reclusorio de Chalco y a otro, de la tercera edad, lo golpearon y aventaron sobre unos nopales en Milpa Alta | «Con la construcción del Metro comenzaron a llegar más delincuentes a la zona», dijo uno de los choferes asaltados | «En efecto, ya ve usted que hasta los de un partido político como de secta mesiánica llegaron a la administración delegacional», dijimos nosotros

Cada vez se vuelve más difícil sobrevivir en una delegación como Tláhuac por tanto
malandro, pero sobre todo por policías y autoridades corruptas que ignoran la situación
La delincuencia en Tláhuac continúa desatada. Hace unos días, al señor Alfonso Ramírez, conductor de un taxi en una de las dos bases que operan en las inmediaciones de la estación del Metro Tláhuac, una mujer joven le pidió el servicio para que la llevara al pueblo de Mixquic, a lo cual accedió sin sospechar de la dama… Cuando llegó a esa población y se adentró en uno de los recovecos del lugar, donde supuestamente se dirigía la pasajera, fue abordado por tres individuos quienes lo encañonaron con una pistola. Por principio de cuentas lo pasaron al asiento trasero, donde dos de los facinerosos comenzaron a golpearlo nada más por el malévolo placer de lastimarlo. Lo fueron a tirar, maniatado, atrás del Centro Preventivo y de Readaptación Social de Chalco, en un camino de terracería que conocían a la perfección estos malandros… Con sacrificios, de acuerdo con el testimonio del señor Ramírez, había logrado adquirir un coche Nissan de modelo atrasado, así como unas placas para poder ganarse la vida de taxista; sin embargo, «por confiado» lo perdí. Dice que los días siguientes anduvo en compañía de familiares en busca de su automóvil por toda la zona de Santa Catarina Ayotzingo, pero sólo encontró a más personas que andaban como él en busca de los coches que también les habían robado. «Esos coches los desvalijan en un dos por tres –comentó que le dijeron por el rumbo–, como son los más demandados acaban por venderlos en partes»… Refiere que cuando logró deshacerse de la cuerda con la que lo habían amarrado, caminó un par de kilómetros para llegar a la carretera que comunica a Mixquic con Chalco, en el estado de México, donde se encontró a un par de policías municipales a quienes les pidió ayuda, pero sólo le dieron diez pesos para su pasaje. «Mira mano, no podemos hacer nada por ti. Así que mejor llégale a tu casa y luego ve y levanta tu acta», dice que le respondieron… De acuerdo con el señor Ramírez, él fue el cuarto de la base de taxis a quien despojaron de su automóvil en tres meses. «El primero fue un don ya grande –refirió–, un par de individuos le pidieron que los llevara a Milpa Alta, y al llegar allá lo agarraron igual en un camino de terracería y sin haber por qué lo golpearon con saña, el señor ya no estaba como para defenderse, y aun así le dieron una chinga los méndigos infelices, y todavía no conforme con eso, acabaron por aventarlo en unas milpas de nopal, imagínese cómo quedó el pobre hombre»… El señor Ramírez se dedica a reparar coches afuera de su casa para sobrevivir, debido a que la delincuencia está desatada. «Con la construcción del Metro comenzaron a llegar más delincuentes a la zona»… Y es cierto, hace unos días reportamos aquí que a un vecino de la Colonia Selene le habían robado su auto Nissan a las cinco de la tarde de afuera de su casa, luego de que llegó, se estacionó, bajó por unos papeles a su domicilio, y en menos de dos minutos que salió, su auto ya no estaba… Curiosamente, ese vecino vive justo en la misma cuadra y sobre la misma acera de donde vive el señor Ramírez… «Ahora se andan metiendo a robar a las casas, por eso ya no hay de otra más que tener una fusca pa’defenderse uno de los rateros, porque de la policía no podemos esperar nada», aseguró a Mercado Sobre Ruedas con un dejo de impotencia… Lo cierto es que en la gestión delegacional de los morenos en Tláhuac los índices delincuenciales se han disparado, mientras en ese partido se encuentran más ocupados en ver de qué cargo se van a apoderar para el próximo año… Así las cosas, para desgracia de la ciudadanía tlahuaquense.

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